Como afecta el color en la arquitectura

Se podría decir que el color como tal no existe, es una radiación electromagnética cuya longitud de onda es captada por la retina y retransmitida por el nervio óptico al cerebro y de ahí al cuerpo emocional y al mental, es decir, cuando lo percibimos, no solamente influye visualmente, sino anímicamente en la persona. Además, el color en si, el que nosotros vemos en un objeto, es el que este refleja al darle la luz, es decir, un tomate es rojo, ya que absorbe el color verde y azul y refleja el rojo, por tanto, podríamos considerar que el color es una sensación subjetiva y nadie puede asegurar con seguridad que percibimos la misma sensación.

Con todo todo, se puede afirmar que el color es la variable destacada del diseño de la construcción, es necesario tanto en la arquitectura como también, en en el interiorismo, como por ejemplo, elegir bien el color cuando quieres transmitir sensaciones diferentes, es decir, no escogerías el mismo color a la hora de querer transmitir frío o calor en un interior, ya que el tipo de color que se utilice en la arquitectura afectará en la forma de entender el edificio como también en las sensaciones que transmite, los colores influyen en las personas. La luz y el color van siempre juntos, uno no puede vivir sin el otro.

El color en la arquitectura interfiere en las proporciones visuales de la forma, en la relación de figura fondo, en la percepción de la geometría del objeto incluso en las dimensiones de este.

Un ejemplo de lo que se quiere transmitir con el color en una edificación, es la casa roja en la nieve, donde aparte de querer identificarla en unas montañas con poca visibilidad y entre la maleza de los árboles, el color rojo refleja también el temperamento del cliente.