Análisis de una película desde una mirada arquitectónica

«Mon oncle» es la película francesa de la que voy a hablar, fue dirigida en 1958 por Jacques Tati y además, ganó un Oscar a la mejor película extranjera.

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Para poneros un poco en contexto, la película está protagonizada por el señor Hulot (Jaques Tati), su hermana, la señora Arpel, el señor Arpel, y su hijo Gerad.

Hulot sin trabajo, se encarga de llevar y recoger al niño de la escuela, aunque durante la película su cuñado le incorpora en la empresa de tubos de plástico en la que él trabaja.

Durante toda la película, se ve los contrastes entre dos mundos, dos maneras de vivir y de entender la ciudad y la arquitectura, además de la diferencia de clases sociales que se muestra a través de los diferentes barrios. Primero está la familia Arpel que vive en un barrio muy moderno, cosa que destaca de la trama, ya que por la epoca en la que fué dirigida, encontramos una casa muy moderna adelantada a la época.

Al contrario de la vivienda de Hulot, situada en un barrio de lo más normal y sencillo.

La arquitectura moderna y minimalista, es la que se ha utilizado en la casa del señor y la señora Arpel. En su conjunto, es un bloque, liso, con bastantes ventanas, cosa que llama mucho la atención, ya que gracias a estas, durante la película ningún personaje necesita de luz extra que no sea la proporcionada por el sol.

Además, como he destacado anteriormente, es una casa moderna, con ventanas abatibles automáticas, una puerta de garaje que se abre con sensor de movimiento, una cocina que funciona solo y unicamente con tecnología… incluso una fuente con forma de un pez de donde sale agua cada vez que se pulsa un interruptor desde dentro de la vivienda (cosa que la la señora Arpel hace cada vez que tiene visita, además es un sistema de aviso para el resto de la familia, indicando que hay alguien importante en casa, como un vecino).

La casa tiene un diseño interior minimalista, es un maravilloso catálogo visual de objetos y de muebles tan modernos como antifuncionales, además no hay ninguna decoración extra, como cuadros, floreros, alfombras, libros… son todo paredes lisas y de un color neutro. La distribución es abierta, con unas escaleras flotantes, y un módulo añadido para hacer la cocina.

Yo no voy a centrarme en una escena en particular, sino que quiero comentar como de importante es la accesibilidad en la casa de los Arpel. Como bien he comentado anteriormente, esta casa destaca por su sencillez y su unión con lo moderno. Esto es tan excesivo que a la vez es incomodo, como podemos ver en el camino que lleva desde la verja por la que se entra al jardín hasta llegar a la vivienda en si. Si que es cierto que este camino es bonito en conjunto con toda la construcción, como podemos ver en el plano hace una especie de «S», por lo que para nada es funcional y es incomodo tener que recorrerlo. Si esté fuese una línea recta, sería más práctico, pero yo creo que se alejaría de la arquitectura del resto de la casa, destacaría y como que estaría «fuera de lugar».

FICHA TÉCNICA

Título original: Mon Oncle

Director: Jacques Tati

Año: 1958

Duración: 120 min

Origen: Francia

Género: Comédia

Guión: Jacques Lagrange, Jean L’Hôte, Jacques Tati

Banda sonora: Franck Barcellini, Alain Romans, Norbert Glanzberg

Reparto: Jacques Tati, Jean-Pierre Zola, Adrienne Servantie, Alain Bécourt, Betty Schneider, Luciens Frégis, Adelaide Danieli, Dominique Marie